Aspectos didácticos de la Guía Multimedia Pantallas Sanas


Los chicos y chicas adolescentes, a los que indirectamente va dirigida esta Guía, tienen cada uno su forma de aprender. Unos serán más deductivos, otros más inductivos, otros se manejarán a base de analogías, otros buscarán trucos nemotécnicos, otros compartirán sus ideas, otros serán más pragmáticos; en fin cada persona tiene un estilo y eso hace que cada una aplique diferentes estrategias para aprender.

Las diferentes pantallas que se proponen en esta Guía constituyen el ámbito de aprendizaje y son, a su vez, marcos de referencia para el empleo de diferentes estrategias tanto de aprendizaje como de enseñanza. El empleo y el estudio de estas tecnologías colocan en el mismo plano al que aprende y al que enseña, a diferencia de otro tipo de situaciones de aprendizaje más clásico. Por eso es necesario emplear estrategias de enseñanza que permitan “aprender todos juntos”, alumnado, profesorado y educadores en general.

Proponemos como metodología de trabajo el aprendizaje cooperativo en donde el aprendiz es el eje central de toda la actividad que debe interactuar con otros aprendices por lo que se genera un dinámica de trabajo en equipo en donde cada uno necesita la colaboración de los demás para llevar a cabo determinadas tareas estructuradas.

Las actividades que se proponen en cada uno de los capítulos pretenden desarrollar actitudes positivas hacia los distintos medios y, como consecuencia, generar un uso saludable entre los jóvenes. En todas las actividades hay unos objetivos y contenidos concretos que orientan sobre lo que se pretende conseguir. En el “desarrollo de la actividad” se describe el proceso a seguir y la dinámica que se puede plantear, aunque cada persona deberá aportar su estilo y sus estrategias para llevar a cabo las propuestas.

En todas se hace referencia a algún tipo de recursos que permitirán desarrollar la actividad, unas veces son sugerencias de fichas, incluidas en el CD ROM, otras veces son documentos audiovisuales que se acompañan en el DVD. Pero en muchos casos se deberán utilizar recursos que aporten los propios jóvenes pues esto hará el trabajo más real y cercano, al tiempo que permitirá una mayor implicación.

Casi todas las actividades terminan en lo que llamamos “puesta en común”, se trata sencillamente de concluir los procesos de trabajo con una reflexión entre todos que permita oír la voz de cada uno de forma que es el grupo -adultos y jóvenes- el que aporta su saber para que toda esa riqueza sea compartida lo que, seguramente, resultará más creíble entre los jóvenes.

Lo que en esta Guía proponemos no son tanto aprendizajes de contenidos sino “aprendizaje” de actitudes y hábitos, por tanto la evaluación de los posibles logros deberá ser hecha observando a nuestros jóvenes en el día a día, reflexionando con ellos y dialogando entre todos. En definitiva se trata de conseguir en los jóvenes una actitud crítica y responsable ante los medios, que sería aquella permite:
  • Usar los medios de forma consciente y beneficiándose de sus posibilidades.
  • Interpretar y entender los mensajes y su trascendencia, más allá de la comprensión del mensaje primario y de la valoración de la calidad.
Estamos convencidos de que esta actitud permitirá extraer todas las ventajas que las nuevas tecnologías de la comunicación ofrecen porque tendremos los medios tecnológicos a nuestro servicio y no al contrario.


José Antonio García Serrano

Prof. Fac. Humanidades, Comunicación y Documentación, Universidad Carlos III de Madrid